La iglesia de los Santísimos Pietro y Paolo es moderna, pero detrás de sus vidrieras de colores se esconde el testimonio de una herida aún abierta y una urna romana de gran valor.
Ayer espacio público y cobertura de una gran cisterna, hoy en día una plaza silenciosa y escondida en los callejones, donde los niños siempre han jugado sin ser molestados: es la plaza Pozzo Dorico.
Una iglesia medieval que incorpora los restos de un antiguo templo, una capilla del siglo XV totalmente con frescos, un claustro renacentista y un convento: todo esto es Santa Oliva, 2000 años de historia encerrados en una plaza panorámica que parece provenir de la Edad Media.
El claustro del convento agustino: un pórtico con 27 capiteles, uno diferente del otro en el piso superior, una obra maestra de la escultura del siglo XV y un pórtico con frescos en el piso inferior. No es sorprendente que los ermitaños aquí encontraran tranquilidad del alma.
Los frescos de la SS. Annunziata, un espléndido ejemplo de pintura del siglo XV, os envolverán en una atmósfera única.
Visible desde gran parte de Cori, el convento de San Francesco del siglo XVI os deleitará con una vista de la ciudad, pero si entráis os dejará sin palabras con su rico cielorraso de casetones.
Escondida entre los callejones, la iglesia de Santa Maria della Pietà encierra sus perlas como una ostra: un antiguo candelabro pascual, una urna antigua para altar, pinturas del siglo XVII y un órgano de prestigio.
Un agradable paseo por los callejones y los principales atractivos de la ciudad dividido por zonas, en pdf, en español, italiano, inglés y danés. Esta guía de Cori fue creada y donada a la Municipalidad de Cori por el intelectual Jan Dybdahl, ciudadano de origen danés pero bienvenido invitado del país desde años.